Pocos capítulos de la historia de Argentina llevan impresos en sus títulos los nombres de sus principales protagonistas, pues, siendo Argentina un país con una historia contemporánea tan convulsionada, resulta difícil imaginar que un solo personaje haya acaparado toda la atención política de una nación tan grande por más de veinte años.
Juan Manuel de Rosas, el Restaurador de las Leyes, es el protagonista de la época de Rosas (1829–1852). Un periodo que, debido a los precedentes históricos y políticos que sentó, y a sus consecuencias tanto inmediatas como futuras, es recordado como uno de los más relevantes y controvertidos de la Argentina del siglo XX. A continuación, os contamos su historia.
¿Qué fue la época de Rosas?
Se conoce como época de Rosas al periodo histórico de la Argentina en el que el poder político estuvo controlado directa o indirectamente por el exitoso estanciero bonaerense y brigadier general Juan Manuel de Rosas.
En cuanto a la duración de este periodo histórico, existen dos versiones distintas, ambas totalmente válidas:
- Desde la perspectiva de Buenos Aires, la época de Rosas se extendió desde 1829 a 1852.
- Ahora bien, desde el punto de vista de la Confederación Argentina, la época de Rosas se extendió desde 1835 a 1852.
En ambos casos, la época de Rosas se sitúa dentro de las guerras civiles argentinas y finaliza con la renuncia de Juan Manuel de Rosas tras su derrota en la batalla de Caseros, el 3 de febrero de 1852, a manos del caudillo del Partido Federal y gobernador de la Provincia de Entre Ríos, Justo José de Urquiza.
Antecedentes y causas de la época de Rosas
1 de diciembre de 1828: golpe de Estado en Buenos Aires
El 1 de diciembre de 1828, a causa del descontento e indignación generado por la firma del tratado de Paz con la Provincia Oriental en las filas del ejército argentino que había luchado en la campaña del Brasil, una sublevación militar liderada por el general unitario Juan Lavalle derrocaría al gobernador bonaerense, Manuel Dorrego, quien despavorido huiría hacia Cañuelas para reunirse con su antiguo comandante general de campaña, Juan Manuel de Rosas.
Tras el derrocamiento de Dorrego, en Buenos Aires, una asamblea de militantes del Partido Unitario nombraría gobernador de la provincia bonaerense a Juan Lavalle.
Este último se enfrentaría a Manuel Dorrego en la batalla de Navarro, el 9 de diciembre de 1828, alzándose con la victoria. Pocos días después, Lavalle ordenaría el fusilamiento del exgobernador Manuel Dorrego, y con ello daría inicio a una cruenta guerra civil que se extendería por gran parte del territorio argentino.
Auge y caída del gobierno de Lavalle
Las acciones bélicas y arbitrarias de Lavalle no serían bien vistas por la Convención Nacional, cuyos integrantes declararían a su gobierno fuera de ley. A pesar de ello, el general Lavalle no estaba dispuesto a abandonar el poder, por lo que, de ser necesario, aplastaría a toda oposición y disidencia política.
Lavalle intentó por todos los medios expandir su control y poderío político-militar por todas las provincias de la Argentina. Sin embargo, para lograr tal proeza tendría que enfrentarse a las fuerzas combinadas de Estanislao López y Juan Manuel de Rosas.
El 1 de diciembre de 1829, tras la ruptura del Pacto de Cañuelas y la firma de un nuevo tratado, el Pacto de Barracas, Juan José Viamonte, gobernador interino de Buenos Aires, convocaba a reunión a la Sala de Representantes.
Sería, pues, en aquellas reuniones que Juan Manuel de Rosas resultaría electo como gobernador titular de la Provincia de Buenos Aires, al mismo tiempo que su gobierno era investido con facultades excepcionales. Esto último daría inicio a la época de Rosas.
Cronología de los acontecimientos de la época de Rosas
Diciembre de 1829: inicio de la época de Rosas en Buenos Aires
En diciembre de 1829, Juan Manuel de Rosas es nombrado por la Sala de Representantes gobernador titular de la Provincia de Buenos Aires con facultades extraordinarias.
Esta coletilla hacia el final de su título le permitía a Rosas, como gobernante, hacer todo lo que creyese necesario para procurar el bienestar de la provincia.
Primer gobierno de Rosas (8 de diciembre de 1829 – 17 de diciembre de 1832)
Aprovechando las facultades extraordinarias que le habían sido otorgadas a su gobierno, Rosas hace lo siguiente:
- Restaura el orden en Buenos Aires.
- Impulsa el modelo económico agroexportador.
- Funda pueblos.
- Reanuda las relaciones con los Estados Pontificios, actual Ciudad del Vaticano.
- Mejora las relaciones sociopolíticas con los pueblos originarios.
En términos generales, la primera gestión del gobierno de Rosas en Buenos Aires fue lo suficientemente buena como para que su reelección no fuese puesta en duda por la Legislatura de Buenos Aires.
Empero, Rosas, ofendido por el hecho de que la Legislatura porteña decidiese no volver a conceder facultades extraordinarias a su gobierno, rechaza la oferta de reelección que le habían ofrecido.
De manera similar, en 1834, tras el éxito de la Campaña al Desierto, Rosas decide volver a Buenos Aires, quizás con la intención de que el gobernador Viamonte renuncie y la Legislatura bonaerense le ofrezca nuevamente la gobernación de Buenos Aires con facultades extraordinarias.
Todo ocurriría según el plan de Rosas, a excepción de las facultades extraordinarias, las cuales no le fueron concedidas. Así pues, encontrándose totalmente desinteresado por gobernar sin estas facultades extraordinarias, decide rechazar la oferta de la Legislatura porteña, asumiendo en su lugar Manuel Vicente Maza.
Asesinato de Facundo Quiroga y eventos posteriores
El 16 de febrero de 1835, una noticia sacudiría los cimientos de la Confederación Argentina: Juan Facundo Quiroga, el segundo hombre más importante e influyente del federalismo, había sido brutalmente asesinado en la Barranca de Yaco, Córdoba, mientras se encontraba de regreso a Buenos Aires.
La muerte de Quiroga recrudecería los conflictos entre las provincias, al sumir a la Confederación Argentina en una total anarquía; la respuesta de la Legislatura porteña no se haría esperar.
Ante el caos, los legisladores porteños nuevamente le proponen a Rosas la conducción del gobierno de la Provincia de Buenos Aires y, por tanto, ser el encargado de las Relaciones Exteriores de la Confederación Argentina.
En esta tercera oportunidad, Rosas no solo exige facultades extraordinarias sino también la suma del poder público, es decir, la soberanía absoluta de la Confederación Argentina.
Los legisladores porteños deciden aceptar las condiciones, por lo que, el 7 de marzo de 1835, Rosas asume por segunda vez como gobernador de Buenos Aires con facultades extraordinarias.
Por si ello no fuera suficiente, ahora Rosas ostenta el poder ejecutivo, el poder legislativo y el poder judicial de la Confederación Argentina.
Segundo gobierno de Rosas (7 de marzo de 1835 – 3 de febrero de 1852)
Oposición política argentina: la generación del 37
El primer gobierno de Juan Manuel de Rosas palidece ante el alto nivel de represión y castigo de todo tipo de disidencia política (intelectual o militar) que ostenta su segundo mandato.
Desde la perspectiva de la Confederación Argentina sobre la época rosista, las connotaciones tiránicas que son dadas al estanciero porteño cobran mayor sentido, pues sería durante el segundo gobierno de Rosas que su cruento brazo armado, la Sociedad Popular Restauradora, más conocida como la Mazorca, cobraría un mayor número de vidas.
Durante los diecisiete años que duraría su segundo mandato provincial, Rosas enfrentaría una variedad de frentes políticos opositores. Unitarios, federales, pueblos originarios, intelectuales, uruguayos, brasileros, ingleses y franceses; todos y cada uno de estos harían frente a la hegemonía rosista en distintas oportunidades a lo largo de sus diecisiete años de historia.
A partir de 1837, el gobierno de Juan Manuel de Rosas recibiría un duro golpe político e intelectual de parte de un sector totalmente inesperado: la Generación del 37. Este grupo de jóvenes intelectuales, dentro de los que destaca Juan Bautista Alberdi, aparecería en el escenario político argentino para cuestionar tanto el ideario rosista federal como el ideario unitario.
El terror que infundía el régimen de Rosas fue lo suficiente efectivo como para lograr que los miembros de la Generación del 37 se exiliasen en el Estado Oriental.
Sin embargo, aquello sería tanto una ventaja como una desventaja para Rosas, pues ahora que los jóvenes de la Generación del 37 se encontraban fuera de su jurisdicción, estos podrían usar, con total libertad, su mejor arma: el lápiz y el papel.
Durante los próximos años, Rosas tendría que lidiar con las consecuencias de sus acciones: ahora no solo era conocido en Latinoamérica, sino también en Europa.
Oposición política extranjera: los bloqueos marítimos de Francia e Inglaterra
En 1838, Francia decide bloquear el río de la Plata; a pesar de ello, Rosas consigue sanear las relaciones diplomáticas con Francia y el bloqueo es levantado. No obstante, su paz con Francia sería efímera y pronto las hostilidades diplomáticas serían reanudadas.
Por si fuera poco, en 1845, Inglaterra decide tomar partido en el conflicto diplomático franco-argentino, por lo que se alía con Francia e impone un bloqueo marítimo en el puerto de Buenos Aires, deteniendo, ipso facto, el avance de la ideología de Rosas por el joven Estado Oriental.
Fin de la época de Rosas: batalla de Caseros
En 1851, tras resistir el embate de sus opositores de la Confederación Argentina y los países aledaños, y tras haber restablecido la paz con Francia e Inglaterra, Juan Manuel de Rosas sería traicionado por uno de sus generales más importantes: Justo José de Urquiza.
Con una fuerza de 23.000 hombres, Rosas, profundamente indignado por la traición, haría frente al Ejército Grande de Justo José de Urquiza.
Este último contaba con el apoyo militar de varias provincias argentinas y emigrados unitarios, así como con fuerzas del Estado Oriental y el Imperio del Brasil; en total, unos 24.000 hombres conformaban la coalición militar formada por Urquiza.
Así pues, el 3 de febrero de 1852, las tropas de Rosas y Urquiza se enfrentarían en la mítica batalla de Caseros. Aquel día, la suerte se apartaría de Rosas, quien caería derrotado ante el Ejército Grande de Urquiza.
La derrota de Rosas en la batalla de Caseros puso fin a su dominación política sobre la Confederación Argentina. Sin embargo, aquello no significó, ni de cerca, el fin de los enfrentamientos militares en el territorio argentino.
Características de la época de Rosas
Estas son algunas de las características de la época de Rosas:
Características políticas de la época de Rosas
Su principal protagonista, Juan Manuel de Rosas, concentra el poder político de la Argentina en su provincia natal, Buenos Aires. Desde allí, se dedica a controlar al resto de provincias argentinas mediante el flujo de comercio exterior y su política aduanera.
Todo intento de sublevación en contra de la hegemonía bonaerense fue rechazado categóricamente, incluso si el mismo tuviese como finalidad plantear una reorganización social y política de la Argentina; algo, a todas luces, necesario para el país.
La disidencia y oposición política, tanto intelectual como militar, fue severamente castigada y combatida; las practicas más recurrentes, exilios y asesinatos.
El color azul, característico del Partido Unitario, es reemplazado por símbolos de color rojo, propio del Partido Federal.
Características económicas de la época de Rosas
En materia económica, Argentina, en aquel entonces Confederación Argentina, comienza a erigirse como un país agroexportador. En consecuencia, los estancieros y terratenientes se ven enormemente beneficiados por la política económica rosista, especialmente los de la Provincia de Buenos Aires.
Características culturales de la época de Rosas
En materia cultural, el gobernador Rosas, aunque intelectual, decide prescindir de la transculturización iniciada por el expresidente Bernardino Rivadavia, quien quería convertir a la Argentina en una extensión cultural de Europa. Rosas, por el contrario, opta por construir una cultura argentina propia.
Consecuencias de la época de Rosas
La siguiente lista expone y enumera las consecuencias más relevantes surgidas tras el fin de la época de Rosas:
- Poco después de que el ejército de Rosas fuese derrotado por el Ejército Grande de Urquiza, este último ordenaría la ejecución de los coroneles Martiniano Chilavert y Martín Santa Coloma, aunque no fueron, ni de cerca, los únicos unitarios en ser asesinados por órdenes de Urquiza tras la caída de Rosas.
- Juan Manuel de Rosas se exilia en Southampton, Inglaterra, donde permanece hasta el momento de su muerte, el 14 de marzo de 1877.
- Justo José de Urquiza asume el manejo de las relaciones exteriores de la Confederación Argentina y pone en marcha un proyecto de organización nacional mediante la reunión de un Congreso Constituyente.
- Muchos argentinos. que habían permanecido exiliados en Montevideo y en otras ciudades vecinas a la Argentina, deciden regresar a su patria tras enterarse que la hegemonía de Rosas había llegado a su fin.
- Por contradictorio que parezca, Urquiza, bajo su investidura de director provisorio de la Confederación Argentina, prohíbe el castigo de pena de muerte por delitos políticos; una práctica nefasta que él mismo había aplicado sin juicio alguno. Asimismo, prohibió la confiscación de bienes en toda la Nación Argentina y nacionalizó los ingresos de la aduana bonaerense.
- La Provincia de Buenos Aires se separa de la Confederación Argentina y se organiza como un Estado independiente bajo el nombre de Estado de Buenos Aires. Este Estado, en parte semiindependiente, existió entre los años 1852 y 1861, siendo anexado nuevamente a la Confederación Argentina tras la victoria de Bartolomé Mitre en la batalla de Pavón, el 17 de septiembre de 1861.
Referencias:
- Episodio 03: El Restaurador (1835-1852) – Ver La Historia. Televisión Pública.
- Época de Rosas. Wikipedia.
- Manuel Dorrego. Wikipedia.
- Juan Lavalle. Wikipedia.
- Batalla de Navarro. Wikipedia.
- La Batalla de Caseros – Fin de una época. El Historiador.
- La caída de Rosas. Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Provincia de Buenos Aires.
- Martiniano Chilavert. Wikipedia.
- Martín de Santa Coloma. Wikipedia.
- Estado de Buenos Aires. Wikipedia.
- Batalla de Caseros. Wikipedia.
- Justo José de Urquiza. Wikipedia.