Guerra de Corea

A menudo olvidada entre el convulsionado y extremadamente belicoso siglo XX, la guerra de Corea, junto a la guerra de Vietnam, fue una de las contiendas bélicas más representativas de la mítica Guerra Fría (aquella colosal y extensa contienda ideológica protagonizada, principalmente, por los Estados Unidos y la extinta Unión Soviética tras el final de la Segunda Guerra Mundial).

Si bien la sombra de la Guerra Fría se cierne sobre la mayoría de las acciones militares libradas tras la derrota de las potencias del Eje en 1945 (eclipsando, en cierta medida, dichos episodios históricos), la guerra de Corea destaca, aún por encima de ello, por ser la única que, desde mediados del siglo pasado, técnicamente permanece vigente en la actualidad.

Fecha de la guerra de Corea

La guerra de Corea se extendió desde el 25 de junio de 1950, con el inicio de acciones militares por parte del entonces dirigente de Corea del Norte, Kim Il-sung, hasta el 27 de julio de 1953, con la firma del Acuerdo de Armisticio de Corea.

En total, las hostilidades estuvieron vigentes en la península norcoreana durante 3 años, 1 mes y 2 días. Sin embargo, ante la ausencia de la firma de un tratado de paz, la guerra de Corea, técnicamente, permanece vigente en la actualidad.

Beligerantes de la guerra de Corea

El siguiente cuadro tiene como finalidad principal listar a los beligerantes involucrados en la guerra de Corea y sus comandantes respectivos.

Asimismo, expondrá el nombre de aquellos países que ofrecieron apoyo militar y/o logístico, por mínimo que fuese, a uno de los dos bandos enfrentados:

Beligerantes Con el apoyo militar de… Con el apoyo logístico o médico de… Figuras políticas Comandantes
República de Corea (Corea del Sur) Comando de la ONU Estados Unidos Dinamarca Syngman Rhee Nacionalidad Nombre
Reino Unido Italia Harry S. Truman Surcoreano Chung Il-kwon
Australia Israel Dwight D. Eisenhower Paik Sun-yup
Bélgica Noruega Clement Attlee Shin Sung-mo
Canadá Suecia Winston Churchill Son Won-il
Colombia India Estadounidense Douglas MacArthur
Imperio Etíope Japón Matthew Ridgway
Filipinas Honduras Mark Wayne Clark
Francia El Salvador Jim Flick
Reino de Grecia Cuba Robert Sink
Luxemburgo Taiwán Laurence B. Keiser
Nueva Zelanda España Sam S. Walker
Países Bajos Alexander Haig
Unión Sudafricana Oliver P. Smith
Tailandia Walton Walker
Turquía William B. Kean
William F. Dean
John H. Church
James Van Fleet
John B. Coulter
Frank W. Milbum
Griego Dionysios Arbouzis
Francés Raoul Magrin-Vernerey
Británico Basil Coad
Turco Tahsin Yazıcı
República Popular Democrática de Corea (Corea del Norte) China Unión Soviética Kim Il-sung Norcoreano Pak Hon-yong
Bulgaria Mao Zedong Choi Yong-kung
Checoslovaquia Iósif Stalin Kim Chaek
Hungría Gueorgui Malenkov Chino Peng Dehuai
Polonia Horloogiyn Choybalsan Deng Hua
Rumania Yumjaagiyn Tsedenbal
Mongolia
India

Contexto histórico de la guerra de Corea

Corea bajo dominio nipón

Desde inicios del siglo XX, el Lejano Oriente se caracterizó por ser una región sumamente belicosa. De todos los Estados que hacían vida en dicha región, indudablemente Japón se erigía como el más poderoso.

Su gran influencia política y enorme poderío militar habían hecho desaparecer todo rastro de influencia china y rusa de la península de Corea para, posteriormente, anexionarse aquel Estado milenario en 1910.

Fotografía de Terauchi Masatake
Fotografía de Terauchi Masatake, primer gobernador general de Corea (principios del siglo XX).

El Imperio nipón ejerció su dominio y control sobre la península de Corea durante 35 años aproximadamente. De hecho, de no haber sido por la estrepitosa derrota sufrida en la Segunda Guerra Mundial de la mano de los aliados de Occidente, quizás la hegemonía japonesa de Corea se hubiese extendido por más años.

El paralelo 38 y las dos Coreas

Así pues, cuando la Segunda Guerra Mundial llegó a su fin, Corea sería dividida, arbitraria y artificialmente, por los vencedores de dicha contienda.

De 1945 a 1948, la Unión Soviética ocuparía el norte de Corea, mientras que los Estados Unidos el sur, retirándose ambas potencias tras haber dejado como legado las actuales República Popular Democrática de Corea (Corea del Norte) y República de Corea (Corea del Sur) en sus zonas de influencia respectivas.

Ambas Coreas adoptarían la ideología de sus fundadores:

  • En Corea del Norte, su dirigente Kim Il-Sung instauraría una especie de dinastía de corte comunista.
  • En Corea del Sur, el dirigente Syngman Rhee optaría por adoptar una economía capitalista de corte estadounidense, aunque ello no sería impedimento para hacer gala de políticas autoritarias ocasionalmente.

La China de Mao Zedong

Por su parte, China, con quien la antigua Corea unificada compartía frontera, acababa de terminar su guerra civil, el 1 de octubre de 1949, en la que se impuso como victorioso el Partido Comunista Chino de Mao Zedong; uno de los tantos partidos políticos comunistas alineados con la Unión Soviética de Iósif Stalin para entonces.

Mao Zedong proclama la fundación de la República Popular China
Mao Zedong proclama la fundación de la República Popular China (1 de octubre de 1949).

La victoria del bando comunista en la guerra civil china dio paso a la proclamación de la actual República Popular China.

Causas de la guerra de Corea

Las siguientes son algunas de las causas del estallido de la guerra de Corea:

División de Corea en dos países

La división arbitraria y artificial de Corea, un Estado con más de mil años de historia y cultura, por parte de las dos grandes potencias vencedoras de la Segunda Guerra Mundial: Estados Unidos y la Unión Soviética.

Antagonismo ideológico de las dos Coreas

El antagonismo ideológico existente y acentuado por la influencia capitalista de los Estados Unidos y la influencia comunista de la Unión Soviética entre Corea del Sur y Corea del Norte, respectivamente.

Inestabilidad política de Corea del Sur

La inestabilidad política de Corea de Sur, provocada por la imagen dictatorial y totalitaria de Syngman Rhee. Esto último, por sí mismo, no representaría un catalizador para el estallido de la guerra de Corea.

Douglas MacArthur y Syngman Rhee
Douglas MacArthur y Syngman Rhee (15 de agosto de 1948).

Sin embargo, bajo la perspectiva del líder norcoreano Kim Il-sung, tal inestabilidad política era la oportunidad perfecta para invadir el sur y reunificar Corea bajo su mando.

Intervención extranjera en la contienda

Probablemente, Kim Il-sung no contaba con la intervención estadounidense en la guerra, ni mucho menos con la intervención de una fuerza combinada de quince países de la ONU, por lo que la guerra de Corea surge como producto de una estrategia militar imprudente o, cuando menos, inocente.

Etapas de la guerra de Corea

El inicio de la guerra de Corea

El 25 de junio de 1950, el soberano absoluto de la entonces recién creada República Popular Democrática de Corea, Kim Il-sung, emprendería una campaña militar para conquistar los dominios de la península de Corea más allá del paralelo 38.

En cierto sentido, la invasión norcoreana tomó por sorpresa al entonces mandatario de Corea del Sur, Syngman Rhee, pues, si bien ya habían ocurrido algunas escaramuzas transfronterizas entre ambas Coreas con anterioridad, estas solo ocurrían en las zonas próximas al paralelo 38, lo cual distaba mucho de las intenciones de Kim Il-sung en aquel momento, quien pretendía unificar a toda Corea bajo su mandato.

Mapa de la guerra de Corea
Mapa en el que se observa el avance de los norcoreanos en la guerra de Corea.

Así pues, los norcoreanos consiguieron avanzar y conquistar rápidamente casi la totalidad del territorio surcoreano, ignorando por completo el hecho de que los Estados Unidos no permitirían la conquista de toda la península de Corea, mucho menos la imposición de una ideología política antagónica a la suya.

Intervención estadounidense y de la ONU

Como respuesta a la invasión norcoreana, los Estados Unidos decidieron convocar al Consejo de Seguridad de la ONU. Esta rápida respuesta política le permitió a los Estados Unidos reunir tropas procedentes de quince países miembros de la ONU (Austria, Bélgica, Canadá, Colombia, Filipinas, Francia, Etiopía, Luxemburgo, Nueva Zelanda, Países Bajos, Grecia, Reino Unido, Tailandia, Turquía y la Unión Sudafricana) para detener el avance de Corea del Norte en la península de Corea.

De esta manera, las tropas estadounidenses, junto a la coalición militar procedente del Consejo de Seguridad de la ONU, bajo el mando del veterano de la Segunda Guerra Mundial, Douglas MacArthur, consiguieron detener el avance norcoreano en la batalla del Perímetro de Pusan, librada entre el 4 de agosto y el 18 de septiembre de 1950.

A pesar de la rápida respuesta de las Naciones Unidas, Corea del Sur se encontraba muy lejos de ganar la guerra; de hecho, la victoria conseguida en la batalla del perímetro de Pusan no hizo sino delimitar el escaso territorio controlado por los surcoreanos para entonces.

Tal fue el acorralamiento que incluso el presidente surcoreano Syngman Rhee se vio forzado a trasladar la capital de su gobierno al puerto de Pusan (la zona más al sur de la República de Corea y que ahora se conoce como Busan).

La contraofensiva de MacArthur: la batalla de Incheon

Mientras se libraban los últimos enfrentamientos de la batalla del Perímetro de Pusan, el veterano de guerra Douglas MacArthur lanzó una contraofensiva totalmente arriesgada e inesperada.

A través de un rápido desembarco en Incheon, ciudad al noroeste de Corea del Sur, las fuerzas de la ONU tomaron por sorpresa a las tropas norcoreanas, logrando avanzar hasta capturar Seúl en pocos días.

Tropas del 31º regimiento de infantería llegando al puerto de Incheon
Tropas del 31º regimiento de infantería llegando al puerto de Incheon (año 1950).

Esto, aunado a la derrota en Pusan y al avance hacia al norte de un contingente de la ONU, forzó a los norcoreanos a replegarse hacia al norte del paralelo 38 para reabastecerse.

En este punto de la historia, la guerra de Corea pudo haber llegado a su fin, pues ambas naciones conservaban la totalidad de sus territorios según lo establecido en 1945.

Sin embargo, desde el bando surcoreano comenzó a gestarse también la idea de reunificar Corea bajo un único mando: el de Syngman Rhee. De esta manera, la guerra de Corea pasó de ser una guerra defensiva a una de conquista para los surcoreanos.

Intervención china

A finales de octubre de 1950, la coalición de tropas surcoreanas, estadounidenses y de la ONU habían ocupado casi todo el territorio norcoreano. Ante tal situación, la China comunista de Mao Zedong manifestó su preocupación, pues no veía con buenos ojos compartir frontera con un país ideológicamente opuesto al suyo.

De esta manera, y sin antes comunicar un parte de guerra, China decide intervenir en la contienda en favor de los norcoreanos, convirtiéndose en sus salvadores, pues estos se encontraban a punto de perder de la guerra. El factor sorpresa del ataque de los chinos provocó la retirada y forzó a las fuerzas de la ONU y los Estados Unidos a replegarse hacia el sur.

Nuevamente, la balanza comenzó a inclinarse en favor de los norcoreanos tras el decisivo enfrentamiento en la batalla del embalse de Chosin, librada desde el 27 de noviembre hasta el 13 de diciembre de 1950.

Marines estadounidenses observan cómo aviones F4U Corsairs lanzan napalm sobre posiciones chinas
Marines estadounidenses observan cómo aviones F4U Corsairs lanzan napalm sobre posiciones chinas (26 de diciembre de 1950).

Este episodio de la guerra de Corea destaca particularmente debido a las bajísimas temperaturas que tuvieron que soportar las tropas combatientes durante los diecisiete días que duró la batalla.

A inicios de enero de 1951, las fuerzas sino-norcoreanas capturaron Seúl, pagando por ello un altísimo precio, pues sus tropas, exhaustas por haber permanecido semanas luchando, no fueron capaces de repeler el ataque de las fuerzas de la ONU al mes siguiente.

De esta manera, tras el éxito de la Operación Thunderbolt, los norcoreanos se vieron forzados a retroceder por detrás del paralelo 38 para fines de marzo de 1951.

Punto muerto y empate técnico: el fin de la guerra de Corea

Durante poco más de dos años, la guerra de Corea permaneció en punto muerto, es decir, ninguno de los dos bandos podía imponerse sobre el bando rival.

Ante tal situación, el desgaste de las fuerzas de combate y los nefastos daños colaterales de la guerra, los dirigentes de ambas Coreas se vieron forzados a poner fin a las hostilidades mediante la firma del Acuerdo del Armisticio de Corea, el 27 de julio de 1953. No obstante, técnicamente dicho acuerdo no significó la firma de la paz, sino un cese de las hostilidades.

Consecuencias de la guerra de Corea

Bajas militares y civiles

Luego de 3 años, 1 mes y 2 días de hostilidades en la península de Corea, la guerra de Corea dejaría un saldo colosal de muertos y heridos en los bandos enfrentados, así como también de bajas civiles:

Beligerantes Bajas militares Bajas civiles Bajas totales
República de Corea (Corea del Sur) 335.000 373.500 708.500
Estados Unidos de América 54.246 (33.629 en combate) 0 54.246
Fuerzas de la ONU 3.000 0 3.000
República Popular Democrática de Corea (Corea del Norte) 336.000 406.000 742.000
República Popular China 400.000 0 400.000
Bajas totales (cifra aproximada) 1.128.246 779.500 1.907.746

Cambios territoriales

En cuanto a los cambios territoriales respecta, tras el final de la guerra la península de Corea quedó prácticamente igual que antes del inicio de la contienda: dividida en dos mitades a ambos lados del paralelo 38.

Si bien hubo algunos cambios territoriales, estos fueron mínimos. Por ejemplo, mientras que Corea del Norte consiguió anexionarse la ciudad de Kaesong, Corea del Sur se anexionó aproximadamente 3.900 km2 que antes pertenecían a su homólogo en el norte.

Zona desmilitarizada en Panmunjom

Tras el cese de hostilidades y la firma del Acuerdo de Armisticio de Corea, se pactó la creación de una zona desmilitarizada en Panmunjom, en torno al paralelo 38, de aproximadamente 4 kilómetros de ancho y 238 kilómetros de largo.

Mapa de la zona desmilitarizada de Corea
Mapa de la zona desmilitarizada de Corea. Imagen de Wikipedia.

Actualmente, la zona desmilitarizada de Panmunjom permanece vigente; de hecho, alrededor de 28.500 soldados estadounidenses continúan resguardando dicha región fronteriza.

Consolidación de dos Coreas ideológicamente opuestas

El cese las hostilidades en la península coreana permitió la consolidación de dos regímenes particularmente opuestos:

  • Corea del Norte: adoptó una política de gobierno extremadamente hermética, antidemocrática, autoritaria e intervencionista.
  • Corea del Sur: prefirió adoptar una economía de libre mercado, convirtiéndose, de esta manera, en una de las economías más poderosas del Lejano Oriente en la actualidad.

Referencias:

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