En la actualidad contamos con muchas organizaciones no gubernamentales alrededor del mundo encargadas de proteger los derechos humanos, una idea que busca garantizar la integridad de todas las personas sin importar su religión, creencias o posturas.
Esta lucha por los derechos humanos tiene su origen en uno de los documentos que se originaron tras la Revolución francesa. Y es que, en efecto, la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano aprobada en 1789 dio inicio a un mundo con más derechos y respeto hacia la integridad de las personas, marcando un hito en las libertades y en los derechos individuales.
Antecedentes de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano
Este documento tiene su antecedente en la Declaración de Derechos de Virginia, la cual fue adoptada en 1776 durante el proceso de independencia de los Estados Unidos.
Considerada como la primera declaración de derechos humanos, esta proclamaba que todos los hombres por naturaleza son libres e independientes y no pueden ser privados de sus derechos. Además, defendía la democracia y que el poder residía en el pueblo.
Este documento y todos sus artículos están inspirados en un documento anterior, la Carta de Derechos o Declaración de Derechos de 1689, la cual buscaba fortalecer las facultades parlamentarias en Inglaterra por encima del reinado absolutista.
El marqués de La Fayette, quien había luchado en la guerra de independencia de Estados Unidos, se inspiró en la declaración de Virginia para componer su documento.
Orígenes de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano
Tras el triunfo de la Revolución francesa y la abolición de la monarquía absoluta en 1789, se estableció la Asamblea Nacional, y sus diputados se fijaron como misión principal la de crear una constitución para Francia.
La Asamblea Nacional Constituyente empezó a trabajar en una constitución, comenzando por un preámbulo que resaltara los derechos fundamentales, tal y como había recomendado Jean-Joseph Mounier.
Se presentaron varios proyectos sobre la declaración, entre los que figuraba uno propuesto por La Fayette. Sin embargo, el proyecto más votado consistía de 24 artículos y fue presentado por el 6° Bureau.
Los artículos expuestos fueron debatidos y votados uno por uno entre el 20 y el 26 de agosto de 1789. Finalmente, tras las modificaciones prevalecieron 17 artículos, los cuales fueron aprobados y promulgados la noche del 3 de noviembre, poniendo fin a los privilegios que caracterizaban al Antiguo Régimen.
Contenidos de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano
A través de este documento se definieron los principios que a partir de ahora iban a regir la sociedad francesa, poniendo fin a todas las tendencias que involucraban al Antiguo Régimen absolutista.
De esta manera, se fijó la nación como el principio de soberanía en lugar del monarca, y a su vez se estableció que la revolución fue necesaria y legitima (es decir, algo necesario para combatir la opresión).
Sin embargo, no fue creada por los revolucionarios como resultado de la revuelta, sino más bien como derechos constatados: derechos naturales del hombre imprescriptibles y superiores a cualquier poder establecido.
Los 17 artículos que componen la declaración abarcan distintos temas que van desde la libertad, la propiedad, la seguridad y la resistencia a la opresión.
El artículo 1 habla sobre el hecho de que todos los hombres son libres e iguales en derechos; sin embargo, no revocó la esclavitud.
Respecto al concepto de libertad antes mencionado, se define y circunscribe en los artículos 4 y 5 que la libertad es poder hacer lo que uno desee sin afectar a los demás, y esta solo puede ser prohibida si se cometen actos perjudiciales a la sociedad.
Sobre las libertades individuales y la presunción de la inocencia se habla en los artículos 7, 8 y 9, a la vez que se abordan las características de la libertad individual.
El respeto a la opinión y el derecho a expresarse libremente queda plasmado en los artículos 10 y 11, respetando la libertad de prensa y conciencia.
Los artículos posteriores hablan sobre la necesidad de la fuerza pública que, junto a los gastos de administración, deben ser subvenidos sobre contribuciones equitativas, estableciendo los derechos sobre estas.
Finalmente, culmina en el artículo 17, donde garantiza el derecho a la propiedad y que nadie puede ser privado de ella, estableciendo los lineamientos para las excepciones.
Críticas a la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano
Uno de los problemas de esta declaración es que no revocó la institución de la esclavitud. A pesar de que hubo presión por parte de funcionarios para que esta fuera abolida, no se la mencionó. Esto posiblemente se debió al lucrativo negocio que había a su alrededor.
Sin embargo, los levantamientos de esclavos en Saint-Domingue se inspiraron en esta declaración y fue así cómo la revolución haitiana se convirtió en la primera revolución de esclavos exitosa en el Nuevo Mundo.
Además, este documento no consideró a las mujeres. Años más tarde, Olympe de Gouges redactó la Declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana en 1791. Este documento, pionero en la emancipación femenina, propone la igualdad de derechos entre hombres y mujeres.
En sus 17 artículos, se encargó de adaptar la Declaración de los Derechos del Hombre cambiando hombre por mujer en algunos pasajes, y en otros equiparaba los mismos derechos, reclamando un trato igualitario en los distintos ámbitos.
Características de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano
Está inspirada en documentos anteriores
Específicamente en la Declaración de Derechos de 1689 y en la Declaración de Derechos de Virginia de 1776, antecedentes de los derechos humanos.
Es universal
Integra a todos los hombres, ya que sin importar su procedencia estos nacen libres e iguales (a pesar de que no abolió la esclavitud).
Los derechos son irrenunciables
Por ninguna razón se puede ser privado de los derechos que integran la declaración, a menos que se cometan actos perjudiciales a la sociedad.
Está relacionada a la Revolución francesa
Es en este periodo histórico que ocurre la declaración, y sus ideas posteriormente serían parte de las revoluciones liberales.
Consecuencias de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano
Gracias a este documento se daría inicio a un mayor respeto y relevancia hacia las libertades individuales y los derechos de las personas, sin importar sus cualidades.
Debido a que conllevó el fin del Antiguo Régimen y del absolutismo, fue parte integral de las revoluciones liberales que azotaron Europa años después con el fin de deponer las monarquías absolutistas.
La Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano inspiró a otros documentos posteriores, como la Primera Convención de Ginebra en 1864, la Constitución francesa y la Convención Europea de Derechos Humanos.
Referencias:
- Una breve historia de los derechos humanos. Unidos por los Derechos Humanos.
- Declaración de Derechos de Virginia. Wikipedia.
- Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano. Wikipedia.
- Declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana. Wikipedia.