Operación Barbarroja

Considerada la mayor operación militar de la historia y el antecedente bélico más próximo a la batalla de Stalingrado, por mucho, la más cruenta y mortífera de todos los tiempos, la operación Barbarroja marcó un punto de inflexión en las pretensiones expansionistas de la Alemania nazi, pues no solo supuso su primer gran fracaso estratégico-militar a manos de la Unión Soviética, sino que también exhibió las vulnerabilidades del modus operandi de su ejército y sus temibles divisiones Panzer.

Resumen de la operación Barbarroja

• Fecha: 22 de junio de 1941-5 de diciembre de 1941 (5 meses y 13 días).
• Lugar: Polonia, Lituania, Letonia, Estonia, Bielorrusia, Ucrania y Rusia.
• Casus belli: invasión alemana de la Unión Soviética.
• Beligerantes:
  • Alemania nazi, con el apoyo de:
    • Reino de Rumanía.
    • Reino de Hungría.
    • Reino de Italia.
    • Finlandia.
    • República eslovaca.
    • Estado de Croacia.
  • Unión Soviética.
• Personajes célebres:
  • Bando de las potencias del Eje:
    • Adolf Hitler (Reichskanzler y Führer de Alemania).
    • W. von Brauchitsch (comandante en jefe del Oberkommando des Heeres).
    • Franz Halder (jefe del Estado Mayor del Oberkommando des Heeres).
    • W. Ritter von Leeb (comandante del Grupo de Ejércitos Norte de Alemania).
    • Fedor von Bock (Generalfeldmarschall o mariscal de campo alemán).
    • Gerd von Rundstedt (comandante del Grupo de Ejércitos Sur de Alemania).
    • Ion Antonescu (Conducător y Primer ministro de Rumania).
    • Benito Mussolini (Duce de la República Social Italiana).
  • Bando soviético:
    • Iósif Stalin (secretario general del Partido Comunista de la Unión Soviética).
    • Gueorgui Zhúkov (mariscal de la Unión Soviética).
    • Aleksandr Vasilevski (mariscal de la Unión Soviética).
    • Semión Budionni (mariscal de la Unión Soviética).
    • Kliment Voroshílov (jefe del Ejército del Norte soviético).
    • Semión Timoshenko (comisario del Pueblo de Defensa de la Unión Soviética).
    • Markián Popov (comandante del Frente Norte soviético).
    • Fiódor Kuznetsov (coronel general de la Unión Soviética).
  • Resultado: victoria soviética. Las potencias del Eje fracasan en su intento de conquistar la Unión Soviética.
  • Consecuencias: Alemania ocupa la totalidad de Bielorrusia, Lituania, Letonia y Estonia, así como parte de Ucrania y Rusia. Asimismo, ordena la creación de dos unidades administrativas para establecer un mejor control sobre los territorios conquistados (el Comisariado Imperial para las Tierras del Este y el Comisariado Imperial de Ucrania). Por su parte, la Unión Soviética resiste y defiende con éxito Leningrado, Moscú y Sebastopol, a la par que decide unirse al bando de los Aliados.

Antecedentes y contexto histórico de la operación Barbarroja

El pacto Ribbentrop-Molotov: la antesala de la Segunda Guerra Mundial

A principios de 1939,  tanto Hitler como los generales del Alto Mando del Ejército eran conscientes de que pelear en dos frentes amplios de batalla, al mismo tiempo, era el peor error estratégico que podían cometer en su intento de expandir la hegemonía del Tercer Reich por toda Europa.

Por tal motivo, los generales del Alto Mando del Ejército decidieron concentrar todo su poderío militar en el Frente Occidental, siendo sus primeros objetivos Francia, Bélgica, Luxemburgo y los Países Bajos.

Sin embargo, antes de dar inicio a la conquista parcial de Europa occidental, Hitler y compañía consideraron pertinente someter a su vecino oriental más cercano, Polonia, por lo que organizaron y pactaron su invasión junto a la Unión Soviética mediante el pacto Ribbentrop-Molotov el 23 de agosto de 1939.

A pesar de que el pacto germano-soviético establecía un periodo de paz de diez años entre los Estados signantes, Iósif Stalin, el entonces máximo líder de la Unión Soviética, era consciente del enorme potencial y poderío militar de la Alemania nazi, así como también del peligro que esta representaba para la expansión de la hegemonía soviética.

Ante tal situación, Stalin decidió apostar por un escenario más optimista: la destrucción de sus enemigos occidentales a manos del Ejército alemán.

La invasión de Polonia: el inicio de la Segunda Guerra Mundial

El 1 de septiembre de 1939, nueve días después de la firma del pacto Ribbentrop-Molotov, el Ejército alemán comenzó la invasión de Polonia, dando inicio a la Segunda Guerra Mundial.

Si bien este acto no fue del agrado absoluto de los comunistas de Europa, Stalin, haciendo gala de una incongruencia ideológica sin igual, no solo permitió la invasión alemana en Polonia, sino que, además, dieciséis días después, realizó la suya propia, invadiendo Polonia por su frontera oriental.

Como respuesta a la acción soviética, el Alto Mando del Ejército alemán ordenó a sus unidades que colaboraran con las tropas soviéticas en la conquista completa de Polonia, así como también en el intento de conquista soviética de Finlandia.

Una vez zanjados los posibles pormenores del Frente Oriental, el 10 de mayo de 1940, Hitler decidió abalanzarse sobre sus enemigos occidentales, consiguiendo derrotar a las fuerzas aliadas y conquistar Francia, Bélgica, Luxemburgo y los Países Bajos en solo seis semanas de operación militar.

Causas de la operación Barbarroja

La caída de Francia, el Lebensraum y los recursos soviéticos

Tras la caída de Francia el 25 de junio de 1940 en la batalla homónima, Reino Unido se erigía como el único enemigo poderoso de Hitler en Europa Occidental.

No obstante, dada su condición como Estado insular, la capacidad militar de Reino Unido se encontraba fuertemente limitada, pues Alemania controlaba las costas de Francia. En consecuencia, cualquier operación anfibia se encontraba descartada debido a su alta probabilidad de fracaso.

Así, pues, con sus enemigos occidentales sometidos y el Reino Unido separado del territorio europeo por el mar, y en función del concepto alemán del Lebensraum (espacio vital), Hitler comenzaría a planificar su siguiente gran golpe militar: someter y conquistar a la Unión Soviética para así hacerse con sus fuentes de petróleo, minerales y demás recursos esenciales para la expansión y consolidación de la hegemonía alemana.

El Führer emite la Directiva n.º 21: operación Barbarroja

En diciembre de 1940, Hitler emitió la Directiva n.º 21, denominada operación Barbarroja en honor a Federico I Barbarroja, uno de los más célebres emperadores del Sacro Imperio Romano Germánico durante la Edad Media. En dicha directiva, Hitler ordenaba la invasión y aniquilación de la Unión Soviética en una rápida campaña militar veraniega.

Desde la perspectiva del Führer, el poder del Ejército alemán era lo suficientemente grande como para aplastar a las tropas soviéticas y avanzar a través de una inmensa línea de más de 2500 kilómetros en tan solo un verano.

En cuanto al porqué de dicho planteamiento ofensivo, es muy probable que Hitler equiparase el poder del Ejército Rojo con el poder de las Fuerzas Aliadas Occidentales (siendo este, quizás, su más grande error en toda la guerra).

De esta manera, la operación Barbarroja daría inicio el 22 de junio de 1941, pasando a la historia como uno de los movimientos de tropas más colosales de la historia.

En total, el Ejército alemán movilizó más de tres millones de soldados, esto es, cerca del 80% de sus efectivos militares, a lo largo de la extensa línea de ataque en el Frente Occidental.

Etapas de la operación Barbarroja

La incredulidad de Stalin y el optimismo de Hitler

A pesar de haber conocido la beligerancia, el liderazgo y el poder militar de Hitler en Polonia, Iósif Stalin jamás pensó que sus aliados alemanes fuesen capaces de romper el pacto Ribbentrop-Molotov, ni mucho menos que iniciaran un conflicto bélico en contra de la Unión Soviética, incluso a pesar de haber sido advertido por sus oficiales de un inminente ataque nazi.

Menos de dos años después de la firma del pacto germano-soviético, el 22 de junio de 1941, ante la incredulidad de Stalin, el Ejército alemán se adentró en territorio soviético, tomando por sorpresa al Ejército Rojo en tres grandes frentes que tenían como destino Leningrado, en el norte, Ucrania, en el sur, y Moscú, en el centro.

Las temidas divisiones Panzer de blindados en conjunción con los aviones de la Luftwaffe coordinaron esfuerzos militares junto a la Infantería alemana, logrando conseguir una amplia ventaja sobre las escasas líneas de defensa de las sorprendidas tropas soviéticas.

La situación no podía ser más favorable para el ejército alemán, pues tan solo en el primer día de operación más de 800 aviones soviéticos fueron cazados en tierra por la Fuerza Aérea de Hermann Göring y otros 400 fueron abatidos en combate; una perdida total de 1200 aeronaves soviéticas.

Mientras se adentraban en territorio soviético, las tropas alemanas iban haciendo prisioneros a decenas de miles de soldados enemigos, a la par que los escuadrones de la Schutzstaffel (Allgemeine SS y Waffen-SS) ejecutaban las políticas raciales de Hitler, exterminando civiles, particularmente judíos, en la retaguardia soviética.

Si bien en un principio la superioridad alemana fue un hecho innegable, a medida que la operación Barbarroja avanzaba, las bajas alemanas también lo hacían, haciéndose cada vez más evidente la enorme dificultad que representaba vencer por la vía militar a toda la población soviética en una campaña veraniega.

La decisión más trascendental de la Segunda Guerra Mundial

A finales de agosto de 1941, con la vanguardia del Ejército alemán a 30 kilómetros de Moscú, y contra todo pronóstico militar, Hitler tomó una de las decisiones más cuestionadas de la historia bélica contemporánea.

Inesperadamente, El Führer ordenó detener el avance de las tropas alemanas hacia Moscú para, posteriormente, dividir al Ejército en tres grandes grupos, cada uno, con objetivos distintos: Leningrado, Moscú y Ucrania.

Si bien Kiev cayó en manos alemanas en menos de un mes, Leningrado, aunque aislada del resto de la Unión Soviética, logró resistir el embolsamiento del Ejército alemán.

Como habría de esperarse, el Führer ordenó doblegar a Leningrado mediante el hambre, por lo que esta fue sometida a un asedio sin igual por parte del Grupo de Ejércitos Norte de Alemania.

Operación Tifón: la ofensiva final contra Moscú

Dos meses después de su controvertida decisión, Hitler pone en marcha la operación Tifón, esto es, la ofensiva final contra Moscú. La demora en el ataque a la capital soviética había sorprendido y disgustado a gran parte de los generales del Alto Mando del Ejército alemán, pues esta había permitido a los soviéticos fortalecer las defensas de Moscú con un millón de efectivos y un millar de tanques T-34.

A pesar de que los primeros asaltos fueron exitosos, las lluvias otoñales y las raspútitsas derivadas de esta frustraron en gran medida el avance de las tropas alemanas, al punto tal de dejarlas atascadas en las proximidades de Moscú, justamente a merced de las mejores defensas soviéticas.

Ante tal error logístico, las vías de suministros alemanas comenzaron a ralentizarse paulatinamente,  cortando así el aprovisionamiento de las tropas de vanguardia y permitiendo a los soviéticos fortalecer aún más sus defensas. De esta manera, las raspútitsas se habían convertido en uno de los peores obstáculos para las pretensiones expansionistas de Hitler.

No obstante, tras el arribo de las primeras nevadas invernales en noviembre, los tanques y demás vehículos alemanes pudieron reanudar su marcha, aunque no por mucho tiempo, pronto el famoso General Frío de Rusia paralizaría la ofensiva alemana por completo.

El contraataque soviético y el fracaso de la operación Barbarroja

El 5 de diciembre de 1941, Gueorgui Zhúkov, el mariscal de campo a cargo de la defensa de Moscú, recibiría la orden de lanzar un poderoso contraataque en contra de las tropas alemanas del Grupo de Ejércitos Centro, las cuales se encontraban a escasos 42 kilómetros del borde externo de la capital.

Ante tal masivo contraataque, las tropas alemanas situadas en las proximidades de Moscú se vieron obligadas a retirarse. De esta manera, el objetivo político de Hitler había fracasado. En otras palabras, la operación Barbarroja había fallado en su objetivo más fundamental, esto es, forzar la capitulación de la Unión Soviética.

Logística de la operación Barbarroja

El planteamiento estratégico de la operación Barbarroja: ambición y optimismo

En un primer momento, la operación Barbarroja fue planeada para avanzar sobre la Unión Soviética a través de dos frentes amplios.

Sin embargo, ya fuese por optimismo excesivo o por una ambición sin igual, el planteamiento de la operación Barbarroja sería replanteado a finales de agosto de 1941.

En consecuencia, las fuerzas alemanas serían divididas en tres grupos, haciéndolas, por tanto, mucho más débiles:

Grupo de Ejércitos Norte

• Integrantes: 21 divisiones de infantería, 5 invasiones de infantería motorizada y 3 divisiones Panzer.
• Mariscal de campo a cargo del grupo: Wilhelm Ritter von Leeb.
• Primer objetivo: conquistar los países bálticos previamente sometidos por Stalin.
• Segundo objetivo: conquistar la ciudad de Leningrado.
• Tipo de objetivo: ideológico.

Grupo de Ejércitos Centro

• Integrantes: 57 divisiones (9 de estas eran blindadas).
• Mariscal de campo a cargo del grupo: Fedor von Bock.
• Primer objetivo: conquistar la actual Bielorrusia.
• Segundo objetivo: conquistar la zona central de la Unión Soviética hasta llegar a Moscú.
• Tipo de objetivo: político.

Grupo de Ejércitos Sur

• Integrantes: 29 divisiones de infantería y 8 divisiones Panzer.
• Mariscal de campo a cargo del grupo: Gerd von Rundstedt.
• Primer objetivo: conquistar Ucrania en su totalidad.
• Segundo objetivo: avanzar hasta el río Volga para posteriormente establecer un control absoluto sobre los pozos petrolíferos del Cáucaso.
• Tipo de objetivo: económico.

Erich Von Manstein: los tres errores de la operación Barbarroja

Según el mariscal de campo Erich von Manstein, por mucho, uno de los mariscales alemanes más destacados de la Segunda Guerra Mundial, se pueden enumerar 3 errores en el planteamiento de la Operación Barbarroja:

1. No haber apreciado debidamente la fortaleza del sistema soviético, en otras palabras, no tomar en cuenta el potencial del país rival y el valor combativo de su ejército.
2. Pretender acabar con la Unión Soviética en tan solo una campaña veraniega, ignorando por completo el vasto territorio que debía cubrirse para el cumplimiento de dicho objetivo.
3. Optar por la victoria militar en lugar de la victoria ideológica-insurreccional. En palabras más sencillas, no haber capitalizado el enorme descontento de la población soviética respecto al régimen comunista impuesto por Stalin.

Asimismo, el mariscal de campo criticó duramente la falta de cuestionamiento del Alto Mando del Ejército alemán, pues, según este, tanto el Führer como los generales nunca llegaron a un acuerdo respecto a cuál de los tres objetivos (ideológico, político y económico) era el mejor a conseguir.

Consecuencias de la operación Barbarroja

Bajas de la operación Barbarroja

Luego de 5 meses y 13 días de enfrentamientos armados, la operación Barbarroja dejó un saldo colosal de muertos y heridos en los bandos enfrentados:

Beligerantes	Muertos	Desaparecidos	Heridos	Aviones destruidos	Blindados destruidos	Cañones y morteros destruidos
Alemania nazi	173 722	20 740	621 308	3800	2758	–
Fuerzas del eje	128 000		–	–	–	–
Unión Soviética	802 191	2 398 778	1 336 147	18 000	20 600	107 200

Consecuencias generales

Las consecuencias generales de la operación Barbarroja fueron las siguientes:

• Las bajas del bando alemán alcanzan la cifra de 958 469 unidades, mientras que la Unión Soviética exhibe un total de 4 537 116 unidades perdidas en combate.
• Los Grupos de Ejércitos Norte, Centro y Sur, en conjunto, ocupan temporalmente Bielorrusia, Lituania, Letonia, Estonia y parte de Ucrania y Rusia.
• Los oblast de Kiev, Járkov y Minsk caen bajo control del ejército alemán.
• Moscú (Rusia), Leningrado (Rusia) y Sebastopol (Ucrania) resisten el ataque de los Grupos de Ejércitos Centro, Norte y Sur.
• La Unión Soviética se alía con el bando de los aliados en contra de Alemania

Consecuencias territoriales

A continuación os mencionamos las consecuencias territoriales de la operación Barbarroja:

• Galicia de los Cárpatos se incorpora al Gobierno General de Polonia, esto es, al gobierno títere establecido por la Alemania nazi en Polonia.
• Creación del Comisariado Imperial para las Tierras del Este (Reichskommissariat Ostland), una unidad administrativa territorial alemana, cuyo dominio comprendía la totalidad de Estonia, Letonia y Lituania; así como partes del este de Polonia, y regiones occidentales de Bielorrusia, Ucrania y Rusia.
• Creación del Comisariado Imperial de Ucrania (Reichskommissariat Ukraine), una unidad administrativa territorial alemana, cuyo dominio comprendía gran parte de los territorios de Ucrania.
• Rumania recupera el control sobre Besarabia.
• Rumania anexa Transnistria.
• Finlandia recupera el control del Istmo de Carelia.
• Finlandia anexiona parte de la Carelia Rusa.