A lo largo de la historia, diversos países, imperios y civilizaciones han utilizado diferentes nombres o títulos para referirse a sus gobernantes y principales autoridades. Uno de estos títulos era el de emperador.
El título de emperador normalmente se obtenía por herencia y se usaba para referirse a la autoridad que gobernaba sobre un imperio, el cual estaba formado por un territorio muy extenso y por varios estados.
Definición de emperador
Se define como emperador al monarca que reina sobre un imperio, o que tiene a varios reyes como vasallos. Por eso, se considera que el título de emperador destaca en dignidad y valor por encima del de rey.
En este sentido, también se le denomina emperador a aquel gobernante que tiene la última palabra, incluso para determinar la vida o la muerte de aquellos que se encuentran dentro de su territorio.
El equivalente femenino de este título es el de emperatriz, el cual se utiliza para dirigirse a la esposa o a la madre de un emperador, o para hacer referencia a una mujer que gobierna por derecho.
En la actualidad, el gobernante de Japón es el único que posee un título que se traduce como emperador.
Significado de emperador
La palabra emperador tiene su origen del latín imperator, que a su vez proviene de la palabra imperar, la cual se traduce como mandar. Sin embargo, durante la Edad Antigua, la palabra emperador también era utilizada para designar a aquel gobernante que conquistó pueblos, por lo que también tiene un origen en la palabra griega emporion.
Origen de emperador
Al parecer, el título de emperador tiene diversos orígenes. Al comienzo de la historia, los soldados eran los únicos que podían poseer el título de imperator, el cual reflejaba los honores y las virtudes del alto mando militar.
Sin embargo, en el año 27 a.C., Augusto se proclamó emperador y retuvo este título con el fin de evitar que algún militar lo obtuviera. Es por eso que es conocido como el primer emperador de Roma.
Asimismo, otros relatos de la historia cuentan que Octavio (el mismo emperador Augusto), luego de la muerte de su tío Julio César, adoptó el título de Cesar Imperator, además de que también comenzó a utilizar el título de Augustus.
Posteriormente, el título de emperador comenzó a utilizarse como una palabra que denotaba dominio, soberanía y reinado de todas las tierras dominadas.
Con el paso de los años, el título de emperador fue evolucionando. De hecho, durante un tiempo los títulos de César, Augustus y emperador fueron considerados sinónimos, hasta la llegada de la Tetrarquía de Diocleciano.
Igualmente, Augusto fue nombrado Dios Olímpico luego de su muerte, por lo que el título de emperador adquirió un nuevo matiz. Así surgió la idea de que los emperadores eran seres divinos o que estaban relacionados con la divinidad.
Finalmente, cabe destacar que, en un principio, el título de emperador no era hereditario. Sin embargo, luego de la Batalla de Muhlberg (ocurrida en 1547) surgió la idea de hacerlo hereditario.
Principal característica de los emperadores
En líneas generales, los emperadores se caracterizaban por poseer poder y dominio absolutos. Los emperadores tenían el poder absoluto sobre todos aquellos que se hallaban en su territorio de gobierno. Sin embargo, cabe destacar que en la antigua Roma el poder del emperador estaba un poco limitado por el senado.
Emperadores destacados de la historia
Augusto
Fue el primer emperador romano de la historia y su mandato significó la transición de república a monarquía. Llegó al poder en el año 27 a.C. y, tras su muerte en el año 14 d.C., fue suplantado por Tiberio, quien se convirtió en el segundo emperador de Roma.
César Augusto, también conocido con el nombre de Octavio, fue el emperador de Roma que duró más tiempo en el poder. Además, fue divinizado luego de su muerte.
Calígula
Calígula fue el tercer emperador de Roma, pero vivió y reinó durante poco tiempo, ya que fue asesinado cuando tenía tan solo 29 años de edad. Sus breves 4 años de reinado y poder se caracterizan por estar marcados de sangre derramada, escándalos sexuales, ejecuciones, megalomanía y un sinnúmero de crímenes.
Muchos historiadores concuerdan en que Calígula era un psicópata embriagado de poder. Siempre situado por encima de las leyes, Calígula se autoproclamó dios y erigió dos templos en Roma que estaban consagrados a su nombre.
Marco Aurelio
Sin duda alguna, Marco Aurelio destacó por ser uno de los emperadores romanos más cultos. Siendo escritor y filósofo, a este emperador se le recuerda por su inteligencia política a la hora de firmar la paz con varios pueblos extranjero.
Nerva
Nerva fue el emperador que puso fin a la dinastía julio-claudia, además de que abrió paso a la dinastía antonina. Este gobernante realizó varias reformas en el sistema financiero de Roma, a la vez que hizo una reforma agraria que favoreció a los más pobres. Aunque solo estuvo en el poder durante dos años, este emperador destacó por su diplomacia y civismo.
Constantino
Su mandato se ubicó durante la etapa final del Imperio romano, específicamente entre los años 324 y 333 d. C. Este emperador destacó por haber adoptado la religión católica y por haberla designado como el culto oficial de Roma.
Qin Shi Huang
Fue el primer emperador de China, el cual unificó los siete territorios combatientes (Han, Zhao, Yan, Wei, Chu, Qi y Qin) en una sola nación, la llamada China (ver Imperio chino). Este líder es mundialmente conocido por su gran inteligencia, y sobre todo por su crueldad, consiguiendo dominar a un gran imperio.
Referencias:
- Emperador. Ecured.
- Emperadores romanos que hicieron historia. Eacnur.
- Biografía de César Augusto, el primer emperador. RedHistoria.
- Retrato Vegetal de Rodolfo II. Historia National Geographic.
- Calígula, el César al que todo estaba permitido. Historia National Geographic.