Alejandro Magno

Alejandro Magno fue uno de los grandes personajes de la Edad Antigua. Expandió los límites de Macedonia desde Grecia hasta la India y destacó por sus dotes de estratega, lo que le sirvió para derrotar al ejército persa en varias ocasiones (muy superior en número al suyo).

¿Cuándo nació Alejandro Magno?

Su nacimiento tuvo lugar el 20 ó 21 de julio del año 356 a.C.

¿Dónde nació Alejandro Magno?

Fue en Pela, la capital del antiguo reino de Macedonia.

Muerte de Alejandro Magno

De qué murió Alejandro Magno

El 2 de junio del año 323 a.C., Alejandro se encontró indispuesto tras participar en un banquete organizado por un amigo. Algunos historiadores creen que alguien lo envenenó, pero otros consideran que enfermó de la fiebre del río Nilo, que sufrió una pancreatitis aguda, que murió a causa del alcoholismo y del sobrepeso o que tuvo una recaída de la malaria que contrajo en el año 336 a.C. (esta probablemente sea la causa de su fallecimiento).

Cómo murió Alejandro Magno

Percatándose de que se estaba muriendo, pues la fiebre no dejaba de subirle, sus generales permitieron que los soldados pasaran a ver vivo a su rey una última vez. Finalmente, Alejandro Magno moría el 10 ó el 13 de junio del año 323 a.C. en el palacio de Nabucodonosor II de Babilonia. Su edad era de 32 años.

Tumba de Alejandro Magno

El cadáver de Alejandro se expuso en el palacio de Babilonia, embalsamándose después por egipcios y caldeos. A continuación, se introdujo en un sarcófago de oro. Dos años después se procedió a cumplir su deseo: descansar en el santuario de Amón, situado en el oasis de Siwa (oeste del actual Egipto).

Su hermano Filipo III de Macedonia hizo el viaje entre Babilonia y Damasco, acompañado de soldados y escoltando a un majestuoso carro fúnebre del que tiraban 64 bestias de carga y que también guardaba las armas y la púrpura del propio Alejandro (además de un baldaquino con columnas).

En Damasco, el que luego sería el farón Ptolomeo I tomó el mando de la comitiva y la llevó hasta Egipo. Sin embargo, no quiso que Alejandro fuera enterrado en el santuario de Amón, llevándolo a Menfis y luego a Alejandría.

La última mención que conocemos de la tumba de Alejandro Magno es del año 215, en la época del emperador romano Caracalla. Ya no se sabría más de ella y, por tanto, desconocemos dónde está enterrado este gran personaje de la historia.

¿Quién fue Alejandro Magno?

Padres de Alejandro Magno

  • Padre: Filipo II de Macedonia, con quien su reino alcanzó una gran expansión territorial (que luego ampliaría aún más su hijo). Se casó nuevamente, algo que disgustó a Alejandro, pues creía que un nuevo heredero podría privarle de su derecho al trono. De hecho, se exilió con su madre tras enfadarse con su progenitor, aunque éste terminó perdonándolo.
  • Madre: Olimpia de Epiro, cuya vida estuvo rodeada de importantes intrigas. Es quien le inculcó que era hijo de los dioses y que iba a ser alguien especial en el mundo. De hecho, Alejandro se autoproclamó hijo de Zeus en Grecia, de Amón-Ra en Egipto y de Marduk en Persia.

Infancia de Alejandro Magno

Su primer instructor fue Leónidas, mientras que el profesor de letras Lisímaco le hizo apasionarse por La Ilíada. Alejandro llegó a aprenderse de memoria los poemas homéricos. También solía leer a Heródoto y a Píndaro.

Alejandro fue un niño nutrido por la cultura griega del filósofo Aristóteles, a quien su padre trajo de Atenas para tal fin. Así, lo educó durante cinco años en cuestiones relacionadas con la política, la filosofía, la lógica, la metafísica, la retórica, la moral, la poesía, la medicina y la guerra.

Se cree que Alejandro domó a su caballo Bucéfalo con sólo 13 años. El animal estaba fuera de control cuando Filipo II lo compró, y ni siquiera los generales de este último habían conseguido tranquilizarlo.

Alejandro se percató entonces de que la criatura se atemorizaba de su propia sombra, de ahí que tomó la sabia decisión de montarlo mirando hacia el sol. Ante el asombro de los presentes, el caballo se dejó cabalgar y desde entonces se convirtió en su compañero de hazañas.

Juventud de Alejandro Magno

A los 16 años, Alejandro Magno ya era gobernador de Tracia, y dos años después luchó en la batalla de Queronea. Se dice que durante su juventud participó en los Juegos Olímpicos, concretamente en las carreras de carros.

¿Qué edad tenía Alejandro Magno cuando tomó el poder?

Despues de la invasión macedonia de Grecia, Filipo II reunió a numerosas polis griegas en el Congreso de Corinto, al que Esparta no acudió. Allí les comentó que quería que estuvieran todos unidos, y para ello creó la Liga de Corinto (también conocida como la Liga Helénica).

En esa reunión quedó claro que tenían que dejar a un lado sus diferencias y centrarse en derrotar a un enemigo común: Persia. Dos años después, Filipo II era asesinado por uno de sus guardias y, como su hijo Filipo III poseía una incapacidad intelectual, le sucedió otro de sus vástagos: Alejandro III.

Su primera medida fue sofocar todas las revueltas de ilirios, tracios y tebanos, pues varias polis griegas se habían levantado después de producirse el asesinato del anterior monarca. Tras esto, con apenas 20 años emprendió su marcha a Anatolia para de este modo luchar contra los persas de Darío III. Para ello, siguió un plan de invasión que ya había trazado su propio padre.

Conquistas, guerras y grandes batallas de Alejandro Magno

Su ejército se componía de 40.000 soldados y 160 embarcaciones. A su lado también estaban varios generales y amigos, caso de Hefestión, Parmenión, Filotas, Ptolomeo, Pérdicas, Clito, Casandro, Antígono Monóftalmos, Crátero, Lisímaco y Seleuco. Atrás dejaba a Antípatro, quien mantendría la autoridad en Macedonia durante su ausencia.

Durante su viaje, Alejandro se detuvo en Troya para de esta manera visitar la tumba de su héroe Aquiles. A continuación se produjo su primer enfrentamiento con los persas en la batalla del río Gránico (334 a.C.). Durante esta refriega, estuvo a punto de perecer a manos de un persa, pero Clito lo salvó en el último momento.

Tras la victoria de los macedonios, se reanudó el viaje y llegó hasta Éfeso, donde ordenó que se reconstruyera el templo de Artemisa. Las ciudades griegas de Mileto y Halicarnaso se defendieron del ataque de las tropas de Alejandro Magno, pero al final la victoria fue para este último.

Llegó entonces a Gordio, que en su día fue la capital del reino de Frigia. En la acrópolis de la ciudad se preservaba la carreta de su fundador, el rey Gorgias, que se mantenía asegurada con un enrevesado nudo (el mismo que ha dado lugar a la expresión nudo gordiano).

Una leyenda decía que, quien lo lograse desenredar, se haría con el control de Asia. Cuando Alejandro Magno lo vio en el año 333 a.C., tomó su espada y lo partió en dos.

La siguiente etapa del viaje fue Siria, donde luchó contra los persas en la batalla de Issos (333.a.C.). Los griegos vencieron a un ejército de 500.000 hombres y capturaron a la familia de Darío III: su madre Sisigambis, su esposa Estatira y sus hijas Dripetis y Barsine-Estatira. Esta última se convertiría en una de las esposas de Alejandro.

Tras fundar la ciudad de Alejandreta en las proximidades de la batalla de Issos, su siguiente destino sería Tiro. Dado que estaba situada en una isla, Alejandro ordenó construir un istmo artificial para poder acceder a ella. Esto provocó que el asedio durase unos ocho meses y que arrasase la ciudad a causa de su resistencia.

A continuación llegó a Egipto y liberó a la región de la opresión persa. Los egipcios lo aclamaron y fue coronado faraón. Allí estuvo durante medio año, lo que le sirvió para planear la construcción de la ciudad de Alejandría.

Su enfrentamiento con Darío III seguiría en Mesopotamia, concretamente en la batalla de Gaugamela (331 a.C.). Aunque Alejandro Magno estuvo a punto de acabar con la vida del rey persa, finalmente éste consiguió huir hacia el este.

El griego entró victorioso en Babilonia, donde fue recibido con algarabía por la multitud. La ciudad dejó fascinado a Alejandro, quien incluso meditó si quedarse a vivir allí. Sin embargo, continuó su trayecto y se hizo con las ciudades de Susa, Pasargada y Persépolis, la capital del Imperio persa.

Durante su huida, Darío III fue asesinado en el año 330 a.C. por sus propios nobles, encabezados por Bessos, quien se convritió en su sucesor bajo el nombre de Artajerjes V. Dado que Alejandro no consideró que lo que había hecho fuera digno de admiración, lo persiguió hasta Bactriana y, tras darle caza, lo mutiló.

Alejandro dejó a Clito al mando de esta región en el año 328 a.C. Sin embargo, durante un banquete, este último inició una discusión en la que acusó a Alejandro de integrar demasiado a los persas y de dejar de lado a Macedonia. Según Clito, no estaba a la altura de su padre Filipo II.

Ambos se pelearon físicamente, usando Alejandro una lanza con la que atravesó a su amigo. Consciente de lo que había hecho, el propio Alejandro quiso quitarse la vida, pero sus soldados se lo impidieron. Estuvo tres días deprimido y lamentando lo que había hecho.

Sin embargo, Alejandro no se quitó de la cabeza que conspiraban contra él, de ahí que ordenara el asesinato de Filotas y de su padre Parmenión.

Prosiguió entonces su viaje hasta Maracanda, donde se casó con la princesa Roxana. Luego se introdujo en la India, derrotando al rey Poros en la batalla del Hidaspes (si bien lo dejó como sápatra del lugar por la valentía con la que había combatido). Bucéfalo, el caballo de Alejandro, murió en este combate, de ahí que el monarca griego levantara una ciudad en su nombre: Alejandría Bucéfala.

La campaña había dejado al ejército exhausto, por lo que sus hombres se amotinaron y no quisieron adentrarse aún más en la India. Aconsejado por su oficial Coeno, dio la orden de regreso, si bien en el camino de vuelta se encontraron con la aguerrida tribu de los malios.

Durante la refriega, una flecha alcanzó el pulmón de Alejandro. Sus hombres, creyendo que estaba muerto, cargaron contra la ciudadela de los malios y acabaron con la vida de sus habitantes, incluyendo a mujeres y niños. Sin embargo, Alejandro sobrevivió a la herida gracias al buen hacer del cirujano Critodemo de Cos.

Años después, ya de regreso en su admirada Babilonia, Alejandro moría en junio del año 323 a.C. Con sus conquistas, contribuyó a difundir la cultura helenística en Oriente.

Sucesores de Alejandro Magno

Alejandro dejó como herederos a su hijo póstumo y a su hermano Filipo III. Sin embargo, nunca gozaron de un poder efectivo y la administración del imperio recayó en el regente Pérdicas, cargo que mantuvo hasta su muerte (año 321 a.C.).

Cinco años después de la muerte de Alejandro, el imperio se había fragmentado entre sus generales, quienes iniciaron una serie de contiendas a las que se las conoce como guerras de los Diádocos. Así, en el año 304 a.C. existían cinco reinos con sus respectivos sucesores:

  • Macedonia: Casandro, hijo de Antípatro. Mandó asesinar a la familia de Alejandro, caso de sus hijos Alejandro y Heracles, su madre Olimpia y su esposa Roxana.
  • Tracia: Lisímaco.
  • Mesopotamia: Seleuco.
  • Egipto: Ptolomeo.
  • Anatolia: Antígono, que quería reconstruir el imperio, lo que hizo que el resto de diádocos se volvieran en su contra y muriese en una batalla acontecida en el año 301 a.C. Los vencedores se repartieron su reino y terminaron con cualquier atisbo de recuperar el esplendor del imperio de Alejandro. Comenzaba el período helenístico

Curiosidades de Alejandro Magno

  • ¿Cómo era Alejandro Magno? Destacaba por su apostura, teniendo el tic de inclinar la cabeza sobre su hombro derecho. Su estatura era de 1.60 metros y el color de su piel el blanco. La nariz era grande, de base ancha y un poco torcida a la izquierda. Tenía heterocromía, es decir, un ojo de cada color (el izquierdo era marrón y gris el derecho). Su pelo era semiondulado y de color castaño claro. Probablemente fuera zurdo.
  • Durante sus campañas siempre llevaba un libro de La Ilíada, profesando una gran admiración por el personaje de Aquiles.
  • En doce años recorrió más de 26.000 kilómetros.
  • Fundó numerosas ciudades, casi todas ellas llamadas Alejandría en su honor.
  • Después de obtener la victoria en una batalla, realizaba sacrificios de animales como agradecimiento a los dioses. Asimismo, Zeus aparecía en la mayoría de las monedas que ordenó acuñar, mientras que Hércules ocupaba el anverso de las mismas (con unos rasgos que se asemejaban cada vez más a los del propio Alejandro).
  • Fue fuente de inspiración de otros conquistadores, caso de Julio César o de Napoleón Bonaparte.

Alejandro Magno, la película sobre el conquistador

Año: 2004. Duración: 2 horas y 55 minutos (3 horas y 34 minutos en su versión extendida). Director: Oliver Stone. Guionistas: Oliver Stone, Christopher Kyle, Laeta Kalogridis. Banda sonora original: Vangelis. Reparto: Colin Farrell, Angelina Jolie, Val Kilmer, Anthony Hopkins, Rosario Dawson, Jared Leto, Christopher Plummer y Jonathan Rhys-Meyers.

Presupuestada en 155 millones de dólares, la película ingresó 167.3 millones en todo el mundo (en Estados Unidos funcionó especialmente mal, ya que apenas recaudó 34.3 millones).

La película arranca con un anciano faraón Ptolomeo I (Hopkins), quien nos narra la historia de Alejandro Magno (Farrell) desde su infancia. Así, observamos la complicada relación que existía entre Filipo II (Kilmer) y Olimpia (Jolie), su bisexualidad y sus conquistas (algunas de ellas muy resumidas o incluso agrupadas en una sola).

Referencias:

  • Antigua Grecia 5: Alejandro Magno – La conquista de Persia (Documental Historia). Pero eso es otra Historia.
  • Alejandro Magno. Historia con el móvil. Juan Jesús Pleguezuelos.
  • Atlas ilustrado de la historia del mundo en mapas. John Haywood, Brian Catchpole, Simon Hall, Edward Barrat.
  • Alejandro Magno, realidad y leyenda. UNED.
  • La antigua Grecia III | Alejandro Magno, la época helenística y el legado griego. La cuna de Halicarnaso.
  • Alejandro Magno. Wikipedia.
  • ¿Se sabe dónde está la tumba de Alejandro Magno? UNED.
  • Alejandro Magno: El camino hacia el poder.
  • Alejandro Magno. IMDB.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *