Acadios

Los acadios fueron el pueblo que sucedió a los sumerios. Llegaron a la antigua Mesopotamia desde la península arábiga, desarrollándose su imperio, el primero conocido en la historia, durante la Edad Antigua. Sargón I de Acad fue su líder más importante.

¿Cuándo comenzó y cuándo terminó el Imperio acadio?

Sus inicios se establecen en el año 2334 a. C., con las conquistas de Sargón, mientras que su finalización se sitúa en el año 2154 a. C.

Ubicación geográfica del Imperio acadio

Se situó en toda la cuenca de los ríos Tigris y Éufrates (zona actual de Irak). Además, también comprendía Elam (suroeste de Irán), Siria e incluso el Líbano y ciertas tierras de la costa mediterránea.

Ubicación geográfica del Imperio acadio
Mapa del Imperio acadio y direcciones hacia las que se dirigían sus campañas militares. Imagen de Wikipedia.

Orígenes de los acadios

Este pueblo semita era nómada y nació en la península arábiga. Desde allí se trasladaron a Mesopotamia en el Protodinástico I (29002700 a. C.), volviéndose sedentarios e instalándose en las tierras situadas al norte de Sumeria. Esa región se llamó Acadia, de ahí que estos semitas comenzaran a ser conocidos por ese nombre.

Historia de los acadios

Sargón I de Acad

Si bien en un principio los acadios se llevaban bien con los sumerios, posteriormente Sargón de Acadia, también conocido como Sargón el Grande, se convirtió en líder tras una revuelta y empezó a luchar contra otras ciudades-Estado. Así, derrotó al sumerio Lugalzagessi y continuó sus contiendas hasta que controló gran parte de Mesopotamia.

Mapa del Imperio acadio en tiempos de Sargón
Mapa del Imperio acadio en época de Sargón. Se muestran sus victorias y sus expediciones militares y comerciales. Imagen de Wikipedia.

De esta manera, unificó las distintas ciudades-Estado y fundó un imperio. Para celebrar sus triunfos, ordenó que se construyera la ciudad de Acad. Su reinado tuvo lugar entre los años 2334 y 2279 a. C.

Los descendientes de Sargón

A continuación os mencionados al resto de reyes del Imperio acadio, indicando las fechas de sus respectivos reinados:

  • Rimush (22782270 a. C.) y Manishutusu (22692255 a. C.): hijos de Sargón. Al igual que su padre, tuvieron que hacer frente al levantamiento de varias ciudades.
  • Naram-Sin (22542218 a. C.): nieto de Sargón. Durante su gobierno, el Imperio acadio alcanzó su máxima extensión gracias a una incesante actividad militar que le permitió conquistar nuevos territorios y acabar con diversas rebeliones. A pesar de ello, también recurrió a la diplomacia. Se le consideró un dios y se construyó un templo que llevaba su nombre.
  • Sharkalisharri (22172193 a. C.): hijo de Naram-Sin. Tuvo que sofocar rebeliones de los elamitas y combatir las invasiones de los amorreos y de los guti. El imperio estaba ya muy debilitado.

Características del Imperio acadio

Características políticas de los acadios

En lo más alto del sistema gubernamental de Imperio acadio se situaba el rey, del que cabría destacar las siguientes características:

  1. Tenía carácter divino y era el que ordenaba la construcción de los templos de los dioses.
  2. Se trataba de una monarquía absoluta.
  3. Era la cabeza de la administración.
  4. Promulgaba códigos.
  5. Tomaba las decisiones en cuestiones de guerra y de paz.

Aunque existía un monarca, también había ensi o gobernadores que trabajaban para él. Tanto los jefes militares como los administrativos estaban a su completo servicio. Respecto a las mujeres de la familia real, ocupaban puestos religiosos de gran relevancia (grandes sacerdotisas, por ejemplo).

Ahora bien, a las ciudades conquistadas se les permitía tener un gobierno con sus propios magistrados (respetando, obviamente, las decisiones del representante directo del rey).

Por supuesto, existían múltiples funcionarios cuya existencia dependía del monarca, ya que se les pagaba con tierras cutivables en usufructo, alimentos, vestimentas y otros bienes de consumo. Era el caso de los administradores civiles y militares, escribas, inspectores, contables, transportistas y artesanos, entre otros.

Características económicas del Imperio acadio

Sargón buscaba ampliar sus conquistas para así hacerse con el control de tierras ricas en piedra, metales y madera, logrando con ello una economía fuerte para su imperio.

El comercio vivió una época de auge, pues los acadios tomaron las rutas comerciales de los sumerios. Además, existió una estandarización de los pesos y de las medidas. De este modo se evitaba que cada ciudad dispusiera de su propio sistema métrico.

Agricultura en el Imperio acadio
La agricultura era una de las piezas clave de la economía de los acadios. Imagen de Flickr.

A los integrantes de la administración se les otorgaba tierras como pago. Tras su explotación, el monarca recibía un diezmo de los productos que dieran.

Lengua de los acadios

El idioma acadio pasó a ser la lengua oficial de Mesopotamia en lugar del sumerio. Ahora bien, esto variaba dependiendo de la zona:

  • Norte de Mesopotamia: existían escasas inscripciones sumerias y, cuando las había, se escribía a su lado la traducción en acadio.
  • Sur de Mesopotamia: convivían el acadio y el sumerio, aunque al final esta última se convirtió en una lengua culta y se utilizó principalmente para determinados fines (el litúrgico, por ejemplo, tal y como sucedió posteriormente con el latín en la sociedad occidental).

Al igual que el sumerio, se trataba de una lengua escrita con caracteres cuneiformes, si bien en el caso acadio eran más estilizados y menos pictográficos. Su utilización perduró hasta bien entrado el primer milenio a. C.

Principales ciudades de los acadios

La capital del Imperio acadio era Acad, también conocida como Acadia, Akkad o Agadé (se desconoce cuál era su ubicación exacta). Otros de sus centros urbanos más importantes fueron los que señalamos a continuación:

  • Nagar (Tell Brak).
  • Urkesh (Tell Mozan).
  • Shehna (Tell Leilan).
  • Eshnunna (Tell Asmar).
  • Kish.
  • Ur.
  • Sippar.
  • Susa.
  • Assur.
  • Tutub (Khafajah).

Religión acadia

Existían dos entes primarios denominados Tiamat, que era la forma femenina del agua salada, y Apsu, que representaba al océano que rodea el mundo.

A partir de ellos nacieron los dioses Lahmu y Lahamu, cuyos cuerpos eran los de una serpiente monstruosa, y Anshar y Kishar, que representaban la totalidad del cielo y de la tierra. Este último dúo dio lugar a la tríada suprema, integrada por Anu (el cielo), Enlil (la atmósfera) y Ea (el agua).

Existió también otra tríada más, en este caso formada por Sin, el dios de la luna, y sus hijos Shamash (dios del sol) e Ishtar (el planeta Venus).

Representación de la diosa Ishtar en el Imperio acadio
La diosa Ishtar aparece en este sello cilíndrico acadio. Se la ve con un casco adornado con cuernos y portando distintas armas en su espalda. Imagen de Wikipedia.

Asimismo, los acadios también se apropiaron de algunos dioses sumerios. Para ello, se les cambió de nombre, adaptándolos a sus necesidades religiosas.

Posteriormente, la unificación acadia también conllevó que se hiciera lo propio con las divinidades, reflejándose esto en la existencia de un dios supremo llamado Marduk (que aparece mencionado en el Código de Hammurabi, escrito durante el imperio de Babilonia).

Respecto a la mitología acadia, señalar que existían numerosos espíritus y demonios, que podían ser tanto buenos como malos. Así, acompañaban al hombre durante toda su existencia, bien fuera para premiarle o para castigarle.

Aunque muchos mitos acadios copiaron y mantuvieron diversos mitos sumerios, otros destacaron por ser completamente novedosos. Los principales se podrían agrupar de la siguiente manera:

  • Mitos sobre la creación del mundo y de los dioses.
  • Mitos de lucha y de victoria.
  • Mitos de destrucción y de salvación: de aquí proviene precisamente la leyenda del diluvio universal.
  • Mitos sobre el Más Allá.
  • Mitos de ascensión.
  • Mitos de exaltación humana y divina.
  • Mitos con criaturas fantásticas.

Algunos de estos mitos aparecen en el Poema de Gilgamesh, una obra escrita entre los años 2500 y 2000 a. C.

Por último, mencionar que en la religión acadia existía un numeroso y organizado clero, tanto masculino como femenino.

El arte acadio

Arquitectura acadia

No hay restos de las grandes ciudades de los acadios, aunque se sabe que levantaban construcciones de gran tamaño (palacios y templos, por ejemplo). Asimismo, y al igual que los sumerios, se creaban monumentos y estelas que recogían los triunfos militares de sus impulsores.

La arquitectura palacial estaba fortificada, presentando las siguientes características:

  • Planta cuadrangular o rectangular.
  • Murallas perimetrales de gran resistencia.
  • División en numerosas estancias del espacio interior, estando distribuidas alrededor de uno o varios patios. Aunque en su forma eran regulares, no se seguía una simetría o un eje longitudinal al ordenarlas.
Palacio de Nagar
Planta del palacio de Nagar.

Entre los ejemplos de la arquitectura acadia habría que citar los siguientes:

  • Palacio de Nagar (Tell Brak): era el palacio de Naram-Sin situado en Nagar. Se trataba de una gran construcción de 10.000 m² que poseía unas enormes murallas que alcanzaban los 10 metros de grosor. Disponía de contrafuertes que flanqueaban la entrada que daba acceso al patio principal.
  • Palacio Norte de Eshnunna (Tell Asmar): edificio administrativo destinado a diversos fines. Así, disponía de patios abiertos que estaban rodeados por varias estancias y salas de almacenaje, aparte de instalaciones relacionadas con el agua, los lavabos y los sistemas de drenaje. Se construyó con los típicos ladrillos planos de la época acadia.

Monumentos regios

Con ellos, los gobernantes buscaban reproducir sus hazañas militares para que perduraran en el tiempo, utilizando para ello materiales no perecederos.

El ellos predomina la figura de un rey guerrero y divinizado, por lo que contrasta con las imágenes del rey piadoso o pacífico de los sumerios. Además, también habría que destacar la importancia de la escritura cuneiforme como expresión artística.

Algunos ejemplos de estos monumentos regios son los siguientes:

Estela de la victoria de Sargón
Estela de la victoria de Sargón.
  • Estela de la victoria de Sargón: en su parte inferior se observa al rey Sargón encabezando junto a su sirviente una procesión de dignatarios militares que portan sus armas. Se cree que eran personas importantes debido a sus atuendos elegantes y lujosos, diferenciándose del monarca por su tamaño, sus peinados y la ausencia de barba. En su parte inferior se observa a una fila de prisoneros de guerra desnudos; algunos de ellos tienen las muñecas atadas, mientras que otros están caídos y son golpeados en el suelo. Por último, en otro pasaje se pueden ver a enemigos muertos cuyos cadáveres son rodeados por perros y buitres. La altura de la estela es de 91 centímetros.
  • Obelisco de Manishutusu: estela sin motivos pictóricos pero que contiene un extenso texto tallado de forma exquisita en el que se explica cómo el rey Manishutusu adquirió ocho grandes tierras. Su altura es de 140 centímetros.
  • Estela de Naram-Sin (o, simplemente, estela de la victoria): se levantó de forma originaria en Sippar y representa la victoria frente a los lullubi en los montes Zagros. Naram-Sin aparece ataviado con un tocado de cuernos, hecho que simboliza su divinidad. El rey se halla de pie sobre los cuerpos de los vencidos, que o bien piden piedad o se retuercen de dolor al ser atravesados por estacas y lanzas. Mide 210 centímetros de altura.
Estela de Naram-Sin del Imperio acadio
Soldados acadios en la estela de Naram-Sim. Imagen de Wikipedia.

Escultura acadia

En primer lugar habría que señalar que se enfatizó el naturalismo en la escultura, algo que se puede comprobar al existir estas características comunes:

  • Existencia de unos ideales físicos de masculinidad y realeza.
  • Los rasgos faciales poseen unas proporciones exactas y están finamente modelados.
  • La barba y el pelo rizado están tallados con cierto intento de volumetría.
  • Incremento de la expresividad de la mirada, algo que fue posible gracias a la utilización de materiales de llamativos colores que se incrustaban en las cuencas de los ojos de las figuras.

Además, destacó la invención de la técnica de la cera perdida de fundición hueca. Con ella se creaban estatuas de metal de gran tamaño, abaratando sus costes. El proceso consistía en las siguientes fases:

Técnica de la cera perdida de fundición hueca.
Fases de la técnica de la cera perdida de fundición hueca.
  1. Se elaboraba el modelo inicial en arcilla.
  2. Se cubría dicho modelo con cera.
  3. Se añadían canales de salida.
  4. Se cubría todo con una gruesa capa de arcilla.
  5. Se cocía todo el molde hasta que la arcilla salía a través de los canales.
  6. Se añadía el metal por los canales.
  7. Por último, se extraía el molde de arcilla.

Respecto a los ejemplos de esculturas del Imperio acadio, vamos a destacar las siguientes:

Cabeza de un rey acadio.
Escultura conocida como Cabeza de un rey acadio. Imagen de Flickr.
  • Cabeza de un rey acadio (anteriormente conocida como la Máscara de Sargón). En la actualidad se cree que puede representar a Manishutusu o incluso a Naram-Sin. La obra posee una gran calidad, un cuidado detallismo y un estupendo naturalismo. Mide 35 centímetros de altura.
  • Estatua de Manishutusu: sólo se conserva la parte inferior que representa a este monarca, quien aparece orando (sus manos se muestran entrelazadas). Llama la atención que en su túnica se aprecien pliegues ondulados tallados de forma realista en la piedra. Su altura es de 100 centímetros.
  • Estatua de Bassetki: mide 67 centímetros de diámetro.
  • Disco de Enheduanna: hecho en honor a la hija de Sargón que fue nombrada sacerdotisa entu (sacerdotisa suprema del dios lunar en Ur). En la obra se observa un ritual religioso llevado a cabo en el templo en el que cuatro figuras caminan hacia un altar con estructura escalonada. El segundo de los personajes, que representa a Enheduanna, sobresale sobre el resto gracias a su tocado y a sus vestimentas. Su diámetro es de 25.6 centímetros.

La caída del Imperio acadio

Los guti, también conocidos como gutis, gutu, guteos o qutu, eran unos pueblos que procedían del macizo montañoso del Zagros (situado entre Media y Asiria). Se trataba de un lugar estratégico, fácil de defender y que poseía accesos a ambas llanuras.

El rey Sharkalisharri no fue capaz de frenar la invasión de los guti, y ello a pesar de que éstos poseían técnicas y armas inferiores a las de los acadios. No fueron los únicos culpables de la caída del Imperio acadio, pero sí uno de los factores determinantes de que ello se produjera. Entre los años 2193 y 2112 a. C. gobernaron veintiún reyes guti.

Diferencias entre los acadios y los sumerios

Los acadios eran un pueblo de etnia semita, al igual que su lengua (la de los sumerios era aglutinante). Le otorgaban una mayor importancia a la propiedad privada, existiendo además una separación del poder real, que se concentraba en el palacio, y del poder religioso, que se llevaba a cabo en los templos.

Referencias:

  • Historia del mundo antiguo. Volumen I (Próximo Oriente y Egipto). UNED. 2003. Ana María Vázquez Hoys.
  • Sumerios y acadios. UNED. Ana María Vázquez Hoys, profesora de Historia Antigua.
  • El arte acadio. UNED. Sara Arroyo Cuadra.
  • Atlas ilustrado de la historia del mundo en mapas. John Haywood, Brian Catchpole, Simon Hall, Edward Barrat.
  • Mesopotamia 2: Sargón y el Imperio acadio (Documental historia). Pero eso es otra Historia.
  • Sargón y el Imperio acadio. Cliophilos, un paseo por la historia.
  • Imperio acadio. Wikipedia.

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